El caso de los Aliados de CMI Alimentos constituye un excelente ejemplo de cómo BID Invest puede apoyar a nuestros clientes en aras de conformar cadenas de valor más inclusivas, convirtiendo los desafíos que trajo el COVID-19 en oportunidades.
A poco de declarada la pandemia, fue claro que traería consigo ganadores y perdedores entre los diferentes sectores de las economías de la región. Los alimentos, en general, estuvieron entre los ganadores, pero algunos canales de distribución se beneficiaron más que otros.
En el caso de las microfranquicias de venta de productos de pollo de CMI Alimentos en Guatemala, llamadas La Casa de Pollo Rey, las ventas crecieron un 8% interanual en el segundo trimestre de 2020. Este crecimiento es aún más relevante cuando se tiene en cuenta el aumento del desempleo y la caída de ingresos que generó la crisis del COVID.
Una combinación de factores contribuyó a este resultado, entre los cuales se destaca el ser pequeñas tiendas de barrio que se beneficiaron de las restricciones de movilidad decretadas y ser reconocidas por sus altos estándares de higiene, reforzados por las medidas de prevención del COVID-19 adoptadas rápidamente con apoyo de CMI.
El 70% de estas 850 microfranquicias guatemaltecas son manejadas por mujeres. Como parte de una encuesta llevada a cabo la última semana de noviembre a 600 de estas microfranquicias, el 43% de ellas afirmó que la crisis del COVID-19 creó oportunidades de mejora para sus negocios, en particular en términos de incremento de ventas en general (70%) y de ventas a domicilio en particular (16%). Pero, como muestra la caída en ventas sufrida a partir de julio, para aprovechar estas oportunidades estos microemprendedores aún afrontan limitaciones.
BID Invest viene trabajando con CMI Alimentos desde hace más de dos años en el apoyo al fortalecimiento de estos microempresarios o “Aliados” como se los conoce, que constituyen un importante canal de distribución para el sector de Industria Pecuaria de la empresa, más relevante aún que el canal de supermercados.
Como parte de este trabajo conjunto, este mes lanzamos un proyecto de entrenamiento de los Aliados que será dictado enteramente de manera digital. En particular se buscará fortalecer las habilidades de manejo del negocio de las microempresarias, así como sus habilidades blandas y empoderamiento. La estrategia y el material de capacitación será desarrollado con el apoyo de la firma consultora FUNDES, que explorará si existen brechas de conocimiento por género y ajustará los materiales en función de ello.
Un diagnóstico en profundidad
Para conocer las necesidades y desafíos para crecer de estos microempresarios, en 2018, BID Invest y CMI Alimentos llevaron adelante una encuesta a 200 Aliados (75% mujeres) y 100 clientas. El trabajo diagnóstico se completó con un grupo focal con 40 mujeres liderado por BID Invest en 2019. Este trabajo permitió caracterizar a estos microemprendedores, que en promedio tienen 37 años, y en su gran mayoría tuvieron un negocio propio previo (63%), tienen cuenta bancaria (70%) y al menos un empleado (67%).
El 57% de los encuestados reconocieron no haber recibido nunca una capacitación relacionada al manejo del negocio –y entre los temas de interés mencionaron mercadeo, contabilidad, atención al cliente y elaboración de planes de negocio. Estos temas están entre los de mayor dificultad de adopción por parte de las pequeñas empresas en países en desarrollo.
Más del 90% de los Aliados cuentan con smartphone y un 60% afirmó preferir Whatsapp como método para recibir información que ayude al negocio. Estos elementos, sumados a las restricciones que impone la crisis del COVID, nos convencieron de la oportunidad de desarrollar un modelo de entrenamiento totalmente virtual, que incluirá una plataforma digital con módulos generales y también sesiones personalizadas con técnicos especializados en diversos temas.
La importancia de una evaluación rigurosa
Un reporte reciente destaca la importancia de escalar intervenciones en el área de entrenamiento de micro y pequeños empresarios de manera costo-efectiva, y cómo el uso de tecnologías digitales y capacitación online tiene un gran potencial, especialmente en el escenario actual marcado por el COVID-19.
Sin embargo, destacan también que hay poca evidencia sobre su efectividad. BID Invest implementará una evaluación de impacto – que incluirá un grupo de microempresarios capacitado y un grupo de control – que permitirá medir la efectividad de la estrategia de capacitación de los Aliados a través de medios digitales.
Esto es muy relevante para CMI Alimentos, que en función de los resultados podrá decidir la conveniencia de escalar la intervención no solo en Guatemala, sino en otros países de Centroamérica donde opera con esquemas de microfranquicias similares.
El caso de los Aliados de CMI Alimentos constituye un excelente ejemplo de cómo BID Invest puede apoyar a nuestros clientes en aras de conformar cadenas de valor más inclusivas, convirtiendo los desafíos que trajo el COVID-19 en oportunidades.
Nota publicada en el blog “BID Invest – Negocios sostenibles”, reproducido en PCNPost con autorización.
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SOURCE: BID Invest
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