Por: Giovanna Fuentes.
A veces, escuchó historias de amores imposibles y dolorosos, historias de sufrimiento del novio que de la noche a la mañana, abandonó a su pareja y se fue con otra, o del esposo que se enamoró de otra, o la historia de que las cosas no funcionaron porque descubrió que no era compatible, la historia del hombre o la mujer posesiva que le hace trizas la vida, en fin…
En los temas del corazón las cosas son mucho más complejas de lo que se piensa. Vivimos en una sociedad donde solo nos fijamos en lo exterior, el carro, la casa, la pinta, el empaque exterior, lo superficial, ¿pero qué hay con la envoltura interior?.
En el afán de conquistar y sentirse amada o amado, no existe mucho tiempo para reflexionar y mirar más allá de lo que sucede. Es verdad, que es genial, sentirse atraído por alguien y que es lo máximo sentirse enamorada (o), sentir cosquillas y maripositas en el estómago. Solo que el amor es mucho más grande y sublime de lo que pensamos.
La gente se casa y al poco tiempo se separa. Lo ideal, sería que lo hiciera antes de conformar una unión. Se actúa como pequeños ‘zombies’, movidos por lo que genera felicidad afuera o nos hace felices o para tener que contarle a los demás una historia de amor. Sin embargo, ¿qué hay detrás de tus reales sentimientos? ¿Te has enamorado de ti misma(o)?.
Algunos ni siquiera se detienen a observar si la pareja que ha llegado es acorde con su vibración. Es decir, está en coherencia con sus pensamientos, acciones, sentimientos, visión espiritual de la vida. La gente es poco consciente de que atrae a su vida, lo que tiene adentro. Ni bueno, ni malo.
Entonces una persona sana emocionalmente atraerá a una pareja igual, si un individuo es inseguro, atraerá a su doble, si es una persona generosa, atraerá a un generoso, pero si es una persona tacaña en algún plano consciente o inconsciente, atraerá a uno igual.
Los seres humanos poco se preocupan por estudiar o sanar la relación con papá o mamá, los dos personajes más importantes en la vida de un SER humano, o revisar el tipo de relaciones que han tenido en su vida. Luego, viene la queja y la frustración cuando las cosas no funcionan como las desean.
Quiero compartir el caso de Helena, una de mis clientes que me autorizó a compartir su historia y su testimonio de sanación emocional durante su proceso de coaching. Ella se había, separado hacia siete años y desde ese momento deseaba atraer a su vida a un hombre soñado. Se inscribió en una de las páginas virtuales. Conoció a Rodrigo, y se enamoraron. Formalizaron su relación y todo parecía marchar viento en popa. Ella, se fue a vivir con él y todo era color de rosa, pero poco a poco, fue apareciendo en escena el verdadero personaje, su carácter y otras situaciones que al principio no evidenció.
Mi cliente, me confesó que ella, se dejó llevar por los ‘cantos de sirena’ y las promesas que le había echó su novio extranjero. Era guapo, profesional, poseía una estabilidad económica y era muy cariñoso con ella. Hasta la celaba, y eso le parecía lindo. “Por fin he encontrado el hombre de mis sueños, se decía”.
Solo que esa burbuja duró tres años, como ella misma lo afirma. Descubrió que era un don Juan, bipolar, vanidoso, celoso, tacaño y pobre de espíritu. Se contactó conmigo e inició su proceso de coaching por recomendación de otra de mis coachees. La hermosa y dulce mujer llegó con el corazón y el alma rota a su primera sesión. Sentía que había fracasado. La gente piensa que una ruptura es un fracaso, eso tan solo es una creencia negativa. No existe el fracaso, existen los maestros que llegan a nuestra vida, para apoyarnos a despertar. Obviamente cuando se tiene la firme voluntad de desarrollar conciencia y crecer interiormente.
A medida que fue transcurriendo su proceso de coaching, su rostro se fue iluminado. Era otra mujer. Ella descubrió que había atraído ese personaje para esculpir su autoestima, su amor propio y desarrollar su mundo espiritual. (No significa religión. En términos prácticos es la conexión con su Yo superior). Se comprometió a respetarse, amarse y valorarse. A estar atenta de las señales externas a trabajar y desarrollar lo que ella deseaba en un hombre. Comprendió que para atraer a su igual compatible, se debe desarrollar adentro el amor por sí mismo y los dones y talentos que desea que el ser amado que llegue a su vida, posea.
Recuerda con la pareja no estamos jugando la vida. Toma conciencia de ello. Ten presente la metáfora del iceberg. No te fijes solo en la superficie. Observa lo que hay debajo: el comportamiento, hábitos, familia, creencias, costumbres, detalles. No se trata de ir por la vida escaneando la gente. Se trata de tomar conciencia de nuestros actos. Escanéate tu primero. Así que te invitó a despertar, amarte, respetarte y valorarte. Tú eres un tesoro y el hombre que te merece llegará a tu vida, cuando abras tu corazón al amor por ti misma y dejes de criticar a otras mujeres y a ti misma.
La pregunta de la Coach del corazón:
¿Te enamoras del primero que te pinta pajaritos de oro?
¿Eres consciente de tu lado femenino y masculino?
¿Te has preocupado por tomar las riendas de tu vida sentimental de manera sana?
¿Qué tan comprometida estas contigo?
¿Vives con alguien solo por tener compañía, aunque sepas que no es la pareja ideal?
¿Te has resignado a vivir con una pareja tóxica?
¿Tal vez tu misma(o) eres tóxico y no tienes conciencia? Ni bueno, ni malo.
Imagen de Petar Milošević, licenciado bajo CC BY-SA 4.0
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