El desempeño financiero a largo plazo es directamente proporcional a una buena gobernanza, administración ambiental y responsabilidad social empresarial, pero probablemente eso ya lo sabías. Si es así, entonces también deberías poder demostrarlo y medirlo, porque hoy en día una visión no es suficiente para convencer a tus clientes.
Lo que se mide se gestiona: Peter Drucker (conocido como el padre de la gestión moderna).
El problema:
¿Qué pasa si te digo que el propósito no es suficiente y que la medición fomenta la ambición? Recuerdo algunas de las competencias —inocentes pero edificantes—con mis amigos y compañeros de clase, durante mis primeros días de escuela. El rango de nuestras “pruebas de rendimiento” comprendían desde copiar textos de la pizarra a nuestros cuadernos en el menor tiempo posible, a comparar las calificaciones de matemáticas al final del semestre y anotar goles “de taco” en un partido de fútbol, entre otras cosas. La medición y comparación era lo que me motivaba a mejorar continuamente para vencer mis propios logros y los de mis compañeros. Pero ¿qué tiene que ver esto con la sostenibilidad? Todo.
Medir el progreso utilizando una lista completa, pero significativa de indicadores es fundamental para convertir la sostenibilidad en una ventaja competitiva.
La solución: Medir, reportar y divulgar:
Año tras año, más empresas se benefician de las ventajas competitivas que les otorga ser parte de un índice de sostenibilidad. Según el Governance & Accountability Institute, un 82% de las 500 empresas de S&P publicaron informes de sostenibilidad corporativa en 2016. En este contexto, un índice de sostenibilidad es un barómetro para medir el nivel de éxito de una empresa. No solo es una radiografía para detectar problemas ambientales, sociales y de gobernanza, sino que también indica la relevancia económica de los parámetros de sostenibilidad para la gestión empresarial y de los inversionistas.
Pero tenemos que ir más allá. Un informe reciente de KPMG, sobre responsabilidad social empresarial (RSE), afirma que no es suficiente vincular estas actividades con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. La gente quiere saber cómo las empresas están contribuyendo al logro de los objetivos, y cuál es su impacto real. No es solo para informar a la sociedad civil, sino también a los inversionistas institucionales, que están buscando formas para alinear sus enfoques de inversión con los ODS. Por eso, la transparencia y divulgación total por parte de las empresas es clave.
La relevancia económica de los parámetros de sostenibilidad para la administración corporativa y los inversionistas es múltiple. Un estudio de la Universidad de Oxford mostró resultados impresionantes sobre cómo la divulgación de estas prácticas puede impulsar sustancialmente un rendimiento financiero superior. Por ejemplo, el 90% de los estudios sobre el costo de capital indica que las normas medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG) sólidas reducen el costo del capital de las compañías.
Si solo existiera una herramienta específica para las compañías de América Latina y el Caribe, capaz de medir y comparar el desempeño de los indicadores ESG…AHORA EXISTE.
IndexAmericas: el primer índice para América Latina y el Caribe:
IndexAmericas es el primer índice de sostenibilidad exclusivo para la región de América Latina y el Caribe. Creado por el Grupo BID (Banco Interamericano de Desarrollo y BID Invest) en asociación con Thomson Reuters, S-Network Indexes y la Universidad Internacional de Florida, IndexAmericas reconoce a las 100 principales empresas, cotizadas en la bolsa de comercio, que operan en la región y lideran el camino hacia la sostenibilidad. También identifica las 30 principales empresas sostenibles con sede en la región.
IndexAmericas se centra en cuatro dimensiones clave: medio ambiente, sociedad, gobernanza corporativa y desarrollo (ESGD). A diferencia de otros índices de sostenibilidad, IndexAmericas evalúa los datos públicos, en lugar de utilizar un cuestionario de autoevaluación. Es una herramienta de gestión que mide más de 400 indicadores ESG y 15 indicadores clave de desarrollo, patentados por el Grupo BID, para evaluar la sostenibilidad corporativa. El profesor Peter Drucker estaría orgulloso de ver este logro.
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