El Presidente Juan Manuel Santos entregó este lunes el Premio Nacional de Alta Gerencia 2014, al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, la Gobernación de Atlántico, el Centro Hospital Divino Niño de Tumaco (Nariño),y la Alcaldía de Paipa (Boyacá).

Fueron en total 241 experiencias participantes, de las cuales 11 quedaron inscritas en el Banco de Éxitos y cuatro fueron las premiadas. Estas entidades recibieron la distinción por enaltecer al servidor público y su labor, consolidar una gestión pública eficiente al servicio de los ciudadanos y aumentar la confianza en el Estado.

El Jefe del Estado manifestó que las iniciativas que se postularon para el Premio simbolizan el compromiso de más de un millón 100 mil servidores públicos con la consolidación de una Colombia en paz, con equidad y mejor educada. “Quiero aprovechar la oportunidad para darle a este evento, que es su versión número 14, la importancia que tiene. Exaltar al funcionario, exaltar al servidor público. Es algo que para cualquier país, cualquier democracia es fundamental”, dijo.

Y agregó: “Por eso no hay nada más importante para cualquier país que la calidad del servidor público. La calidad de las personas que conforman el servicio público, porque de eso depende el desarrollo, el progreso que puede tener cualquier país”.

El Mandatario también enunció los cuatro principios que hacen un buen gobierno; eficacia, eficiencia, rendición de cuentas y transparencia, y dijo que son principios que hacen la diferencia de un buen estado, de un buen gobierno; o de un mal estado y un mal gobierno.  “Por eso qué bueno que podamos ir mejorando cada vez más la calidad de nuestro servicio público y eventos como este donde se exaltan ejemplos realmente maravillosos, es algo que estimula”, anotó.

El Jefe del Estado afirmó que el 97 por ciento de los servidores públicos “jamás han tenido una sola investigación”, son gente honesta, gente que está sirviendo, y aseveró que sólo un 3 por ciento ha tenido investigaciones, muchas de ellas sin ninguna consecuencia.

Finalmente, el Mandatario invitó a cada funcionario público a convertirse en un gestor de paz, gestor con su familia y con sus amigos. “Somos un ejército, un ejército muy grande, de funcionarios en el Gobierno, en el Estado, y si todos nos apropiamos de ese papel de gestores de paz, pues esa paz va a ser mucho más fácil de obtener”, concluyó. (Presidencia)