Archivo. Tomas Rincon (I) Carlos Bacca. Junio 14, 2015. AFP PHOTO / JUAN BARRETO

Dos temporadas y 49 goles después, el Sevilla debe aprender a vivir sin Carlos Bacca. El ariete colombiano fue traspasado al Milan por unos 30 millones de euros y el francés Kevin Gameiro y el italiano Ciro Immobile tienen la difícil misión de sustituirlo.

Bacca, de 28 años y fichado del Brujas en 2013, se marcha del Sevilla con dos ediciones de la Europa League en su palmarés, además de un espectacular doblete en la última final contra el Dnipro (3-2). “Es algo único, volverlo a repetir… Quiero disfrutar de este momento”, dijo Bacca entre lágrimas, con su hija Carla Valentina en brazos, nada más acabar aquel partido, en el que entró en la historia del Sevilla.

A principios de julio el internacional colombiano se despidió de la afición con una emotiva carta: “Estoy triste porque dejo un club muy especial para mí y mi familia. El Sevilla ha hecho que se cumpla uno de mis sueños desde que era pequeño”.

Lo cierto es que tras dejar al club español clasificado para la Liga de Campeones como campeón de la Europa League, ahora el técnico Unai Emery deberá encontrar un recambio de garantías, con Gameiro e Immobile como los principales candidatos para sustituirlo en el 11 titular.

Gameiro, la hora del salto:

Gameiro, de 28 años, llegó también en 2013. A diferencia de Bacca, lo hizo con la etiqueta de estrella y previsible 9 titular, con un contrato por cinco temporadas.

Fichado en 2011 por el París Saint-Germain, el primer año tuvo mayor protagonismo (34 partidos y 11 goles en Ligue 1), pero en el segundo fue eclipsado por Zlatan Ibrahimovic.

A pesar de la batalla perdida con el sueco, Gameiro respondió como revulsivo con 8 goles en el título de campeón de Francia que logró el PSG en 2013.

Con la perspectiva de volver a ser protagonista, el delantero aceptó la propuesta del Sevilla, que lo seguía desde sus tiempos en el Lorient (2008-2011, 50 goles en 108 partidos). Lo que no se esperaba el francés era toparse con un jugador en plenitud como Bacca, que le volvió a relegar al papel de segundo delantero.

Siempre con su olfato goleador como bandera (22 goles en 56 partidos de Liga con el Sevilla), Gameiro, que no juega con la selección desde 2011 (8 partidos y 1 gol), aspira a regresar a los Bleus para la Eurocopa de 2016, que se disputa en suelo francés.

El rápido delantero sufrió en un amistoso de esta pretemporada un golpe en el abdomen, que le obligó a entrenarse con precauciones durante unos días, pero que no le impedirá jugar ante el Barcelona.

Immobile quiere renacer:

La otra apuesta del Sevilla para cubrir el hueco dejado por Bacca es Immobile, internacional italiano de 25 años que llega como cedido por el Borussia Dortmund.

Máximo goleador de la Serie A en el curso 2013-2014 con el Torino (22 goles), Immobile fue traspasado al Borussia Dortmund, donde no consiguió rendir al mismo nivel (3 goles en 23 partidos de Bundesliga).

Internacional con la Azzurra en 12 partidos (1 gol), Immobile llega al Sevilla con el objetivo de relanzar su carrera.

Sus inicios en el club andaluz se han visto perturbados por un golpe que sufrió en un amistoso contra el Watford, que le dejó semi-incosciente.

Con un traumatismo cranoencefálico, se ha visto obligado a entrenar con una máscara protectora, pero estará disponible para el duelo ante el Barcelona.

Además de estos dos arietes puros, el Sevilla cuenta en su plantilla con otros atacantes; el francés Gael Kakuta, llegado este año procedente del Rayo Vallecano, el ucraniano Yevhen Konoplyanka, fichado del Dnipro, y los canteranos Juan Muñoz y Carlos Fernández. (AFP)