Filme de Brad Pitt sobre Chevron en Ecuador puede ayudar a una solución, según autor del libro

Una eventual película producida por Brad Pitt sobre el fraude judicial que alega Chevron, condenada en Ecuador por daño ambiental en la Amazonía, podría ayudar a resolver el litigio por otra vía, dijo a la AFP el autor del libro en que se basa el filme.

La productora del actor, Plan B, obtuvo recientemente los derechos del libro “La Ley de la Jungla”, una investigación de Paul Barrett, editor y periodista de Bloomberg Businessweek, sobre el litigio entre la petrolera y el gobierno ecuatoriano.

Desde entonces, organizaciones ecuatorianas lanzaron una campaña para disuadir a Pitt de avanzar con el proyecto. El presidente Rafael Correa se sumó a la iniciativa el miércoles pasado e incluso invitó al actor a visitar la zona afectada.

Entretanto, sentado en un café del barrio neoyorquino de Brooklyn, donde reside, Barrett rechazó de manera tajante cualquier acusación sobre una influencia externa en su investigación.

“Hay gente inocente y pobre, víctimas. Pero este litigio fue iniciado por abogados estadounidenses. No hay héroes”, dijo Barrett al referirse al resultado de su trabajo, del cual surge un supuesto fraude judicial de parte de Steven Donziger, el abogado estrella de los demandantes indígenas y pobladores amazónicos.

“No se me caen las lágrimas por los responsables de la petrolera. Hubo terribles malhechos en los 70 y los 80”, agregó Barrett, quien ha seguido el caso desde mediados de 2000, dejando en claro que no exime a Chevron de sus responsabilidades.

En 2013, la justicia ecuatoriana condenó de manera definitiva a la firma estadounidense al pago de 9.500 millones de dólares por los graves daños a la salud y al medio ambiente a causa de la actividad que desarrolló entre 1960 y 1990 en la zona de Lago Agrio la petrolera Texaco, adquirida por Chevron en 2001.

Chevron sostiene que Texaco cumplió con la reparación que le correspondía y que el daño fue generado por la estatal Petroecuador, con la que su filial operó en consorcio.

Rehusándose a cumplir con la sentencia, tildó además al fallo de fraudulento e ilegítimo y contraatacó en la justicia estadounidense, donde ha obtenido un fallo a su favor de un magistrado federal de Nueva York.

¿Una vía alternativa?

Para Barrett, “si la película se hace del modo correcto, una audiencia mucho más grande puede aprender sobre la complejidad de este tipo de problema”. “Puede mostrar cómo hubo malhecho empresarial de parte de la compañía estadounidense, fracaso de Ecuador para asumir la responsabilidad de su propio país, malhecho empresarial de corporaciones ecuatorianas”, precisó.

¿Puede el filme ayudar a resolver el litigio? “Espero que sí”, respondió, insistiendo en que “la posición de que Chevron no hizo nada no es cierta y la posición del presidente Correa de que todo es culpa de estos enemigos extranjeros del Estado no está justificada”.

En una nueva edición del libro, Barrett agrega un nuevo capítulo en el que analiza una salida al litigio, retomando una idea del profesor de Derecho de la Universidad de Nueva York, Burt Neuborne, quien propone una solución similar a la utilizada en Alemania con la compañías que utilizaron mano de obra forzada de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Bajo presión por causas judiciales en la década del 2000, estas empresas llegaron a un compromiso para contribuir con unos 5.000 millones de dólares a una fundación que se encargó de distribuir el dinero entre cientos de miles de demandantes.

Personalidad fascinante:

La necesidad de buscar una alternativa tiene que ver con el hecho de que “esta batalla legal que tiene frente en diferentes países no va llevar a ninguna resolución, va a durar para siempre porque las partes seguirán echándose la culpa y rechazando su responsabilidad”, advirtió.

“No es un problema que no se puede solucionar. Se puede decir ‘miremos a la petrolera extranjera’, pero mientras tanto hagamos algo para reparar el daño”, dijo.

Sobre Donziger, Barrett recordó que en febrero de 2011 escribió una semblanza para una revista centrada en el abogado neoyorquino que “ganó esta enorme victoria sobre la segunda compañía petrolera más grande de Estados Unidos”. En el artículo, también planteaba sus interrogantes sobre el modo en que se éste logró tamaño resultado.

“Es una de las personalidades más fascinantes que he encontrado en 30 años de carrera como periodista”, indicó en referencia a este letrado “dispuesto a todo para ganar”, como dice en su libro.

“Él vio la elección de Rafael Correa en 2006 como un paso vital en la historia. Hay muchos ejemplos de su uso del gobierno ecuatoriano para impulsar el proceso”, concluyó, agregando que le gustaría sentarse un día a hablar del tema con el presidente ecuatoriano. (AFP)


 

Debes loguearte para poder agregar comentarios ingresa ahora