El Coaching es para todos. Mujeres y Hombres de cualquier edad. Profesionales o no: Líder, CEO, Project Manager, asesor, presidente, mentor, estudiante, secretaria, empleado, consultor, empresario…

Por: Paola Sosa.

Parece estar de moda pero cuando analizamos el interés que puede tener un individuo en aprender a pensar fuera de la caja y a permitirse ver las cosas desde otra perspectiva, nos damos cuenta del verdadero impacto del coaching en el ser humano.

Pocos saben de qué se trata, muchos asumen que son terapias y es uno de los conceptos más errados. Lo primero que debemos aclarar es que en un proceso de coaching, se trabaja con el lenguaje, las emociones y el cuerpo basados en conversaciones entre el Coach y el coachee –cliente-.

El coaching es una herramienta que te permite descubrir, aprender, tomar acciones y avanzar, convirtiéndote en un observador atento de tu vida. Parte del éxito en un proceso de coaching radica en tomar riesgo y dejar la zona de confort con acciones que te permitan avanzar.

¿Quiénes necesitan un proceso de Coaching?

El Coaching es para todos. Mujeres y Hombres de cualquier edad. Profesionales o no: Líder, CEO, Project Manager, asesor, presidente, mentor, estudiante, secretaria, empleado, consultor, empresario… Cualquier persona que desee moverse, conocerse, ampliar su mundo, cumplir metas, cambiar de perspectiva, descubrir su pasión, vivir desde el aprendizaje y la acción.

¿Qué se vive en un proceso de coaching?

El coaching es 100% una experiencia emocional. Risas, llanto, rabia, desilusión, tristeza, felicidad, impotencia, encuentro, descubrimiento, aprendizaje, reflexión. Un coach se centra en el presente y ayuda durante el proceso a no sólo ver “el árbol sino el bosque completo”.

Duración:

Un proceso de coaching puede durar entre 3 y 4 meses. Alrededor de 10 sesiones (1 sesión por semana de 1 hora). Un proceso de coaching puede darse presencialmente como en línea (vía Skype, por ejemplo)

Después de un proceso de coaching… ¿Qué?

• No serás coach.
• No tienes certificación.
• Balance, equilibrio, vida, conciencia y claridad.

Después de un proceso de coaching tendrás mayor nivel de conciencia sobre quién eres, qué quieres y hacia dónde vas, reconoces lo que te ha afectado por creencias, cultura, conoces tus limitantes y comienzas a vivir una vida con equilibrio, una vida con pasión.