Por: Edith Gómez.
Desde la introducción de las redes sociales y los reality shows en la televisión, una ventana al mundo del emprendimiento se abrió, permitiendo a cualquiera ver un mundo que no siempre fue accesible. Sin embargo, la imagen del emprendimiento que vemos no es una representación completa del rol. Desde fuera, la vida del emprendedor se ve glamorosa. ¿Quién no querría un trabajo donde decides qué hacer y vivir una vida de lujos?
Lo que muchos no entienden es la cantidad de trabajo que toma llegar a ese nivel. No pasa de la noche a la mañana. Según los expertos, tener paciencia es uno de los principales requisitos para triunfar como emprendedor.
En efecto, alguien que ha sido un emprendedor por más de dos horas sabe que en realidad es agotador. Antes de saltar a este “estilo de vida glamoroso”, echa un vistazo a estos cinco atributos que necesitarás como emprendedor para decidir si realmente es lo indicado para ti.
- Familiarízate con el dinero
Esto significa hablar de este, preguntar por él y, a veces, no tener nada. Como emprendedor, tú eres responsable por un negocio que está generando ingresos y ganancias. Para ser exitoso, debes ser pagado por los productos o servicios que ofreces. Esto quiere decir que en algún punto, tendrás que pedir para pagar deudas, justificar tus ingresos, gastar dinero para crecer y pedírselo a tus clientes. Si esto te incomoda, el emprendimiento tal vez no es lo tuyo.
- No seas tímido
Como emprendedor, auto promocionarte sin vergüenza es solo una parte del conjunto. Tienes que promocionarte a ti mismo, personalmente y profesionalmente. Si no disfrutas hablar sobre tus activos, tu conocimiento o de tu negocio y su valor, nadie más lo hará.
Si te das cuenta, los mejores emprendedores son grandes contadores de historias. Ellos hablan sobre sus conflictos personales, cómo empezaron sus negocios y resolvieron sus problemas. No son pocas las historias sobre negocios empezando en el garaje de alguien más y creciendo hasta ser corporaciones de millones de dólares.
Por supuesto, hay muchos emprendedores con negocios exitosos que no les gusta hablar de sí mismo. Ellos son, sin duda, individuos que trabajan duro, pero para alcanzar cierto nivel de autoridad y reconocimiento, tienes que estar dispuesto a tomar tu historia y capitalizarla.
- Enciende tu propio fuego
Si no eres un autodidacta diario, vas a tenerla difícil como emprendedor. Muchas personas toman la estructura de un trabajo de 9 a 5 como estándar. Es un ambiente que ha sido creado para ti, con expectativas, una agenda y alguien que tiene que responderte.
Cuando haces la transición a trabajar por tu cuenta, no es tan fácil tomar ventaja de la libertad que te permite. Tienes que hacer que cada minuto de tu día cuente, especialmente cuando se trata de empezar las tareas que deben hacerse para ser exitoso. Nadie hará el trabajo por ti. Si te sientas allí y desperdicias tiempo, tu negocio eventualmente quedará en el olvido y morirá.
Si eres el tipo de persona que le gusta tomar iniciativa, crecer, hacer cosas todos los días y acabar con la lista de tareas por hacer, entonces alístate para empezar tu camino como emprendedor.
- Dile adiós al horario 9 a 5
Puede que le digas adiós a un horario de trabajo de ocho horas, pero probablemente le estés diciendo hola a días de 10 o 12 horas de trabajo. El emprendimiento requiere hacer lo que sea necesario para ser exitoso y eso podría significar trabajar entre 60 a 80 horas por semana. Involucra levantarte antes que los demás y quedarte hasta tarde.
Debes estar preparado para trabajar el tiempo que se requiere para manejar y empezar un negocio exitoso. Si acortar tus horas de trabajo es una de las principales razones para trabajar por ti mismo, tal vez deberías repensar esa motivación.
- Haz que quieran saber más
Debes ser capaz de cuantificar el valor que puedes ofrecer, como persona y como negocio. Muchas personas empiezan un negocio porque han sido inspirados por los desafíos que han afrontado en el mundo corporativo y han identificado una mejor manera de hacer las cosas o crear una nueva solución. Estas personas tienen la experiencia, conocen la industria y están atando los clavos para llevar sus ideas al mercado.
Un poco de preparación asegurará que tu pasión no fracase directamente cuando sea presentada a la audiencia. Debes ser capaz de explicar rápidamente y precisamente porqué tu solución es más rápida, mejor, simple, más eficiente o barata que la que todos han estado usando. Déjalos queriendo saber más. Esa es la señal de un buen discurso.
Puede que haya algunas cosas que has aprendido de este artículo con las que no te sientas cómodo, pero es parte de la vida. Siempre estamos aprendiendo y haciéndonos mejores. Solo conócete a ti mismo y las áreas en las que tendrás que trabajar si decides tomar el salto hacia un nuevo negocio.
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