Por: Carlos Javier Velásquez Muñoz.

Las zonas urbanas desempeñan un papel fundamental en el logro del desarrollo sostenible, pues en ellas el encuentro de las dimensiones ambiental, económica y social es evidente. En las ciudades se concentran muchos problemas ambientales, a la par que son el motor económico y centro de operaciones de los negocios y la inversión.

De acuerdo con los documentos producidos por la Misión para el Sistema de Ciudades, la Región Caribe tiene 13 de las 41 ciudades de más de 100.000 habitantes del país, lo que equivale al 31.7% del total (DNP, Misión Sistema de Ciudades, 2012). Si se mira un poco más allá, la propuesta: Diamante Caribe y Santanderes de Colombia (DNP, Findeter, 2013) señala que en el diamante del Caribe reside el 29% de la población colombiana y se genera el 23.1% del PIB del país y a través de su territorio se canalizan el 90% de las exportaciones de Colombia. El espacio geográfico del Diamante abarca el 16.1% del territorio nacional e integra 10 ciudades principales y 9 Departamentos del País.

Por su parte, el Departamento Nacional de Planeación ha advertido que en los próximos 20 años la población urbana crecerá del 74% actual al 80% de la población total del país y las proyecciones indican que las zonas urbanas de más rápido crecimiento se están dando en la Región Caribe de Colombia; la tasa de crecimiento de la Región Caribe es del 1.18%, mientras que la de la Región Caribe crece con una tasa de 1.4%.

A pesar de los importantes datos anteriores, ha existido históricamente un bajo nivel de conocimiento sobre las problemáticas urbanas de la región, la información existente al respecto es dispersa y en la mayoría de las ocasiones se encuentra desactualizada o no comulga con la realidad.

En las ciudades de la Región Caribe existen endémicamente graves problemas de espacio público, de ordenamiento territorial, de debilidad en la gestión urbana, que no han sido debidamente estudiados y que por lo general son producto de los vacíos normativos o la falta de institucionalidad. Tampoco ha existido coordinación entre las diferentes oficinas de las administraciones locales y la información no es sistemática ni centralizada. No hay coordinación entre las acciones que desarrollan las administraciones locales y las entidades privadas que manejan algunos servicios públicos de las ciudades, en lo referido a información; la información de la ciudad para tomar decisiones de política pública la manejan secretarías del sector público, sin coordinación entre ellas. Adicionalmente, las empresas privadas que manejan los servicios públicos de las ciudades tienen gran influencia en la toma de estas decisiones, influencia que entendiblemente busca priorizar su propia rentabilidad, en ocasiones inclusive sobre las prioridades públicas.

Sin duda, hay enormes retos para el desarrollo urbano y regional del Caribe y se necesita cualificar la intervención de la academia a este respecto.

No obstante el panorama anterior, son escasos los centros, institutos u observatorio que se dediquen al estudio de la realidad urbano-regional de la Región Caribe. La dinámica de crecimiento urbano sigue su curso y en la mayoría de los casos viene guiada por la falta de información sistemática y ordenada sobre las pautas que necesita el desarrollo urbano. Un planteamiento coherente e integrado que proporcione una metodología aplicable a las ciudades y que tenga en cuenta las circunstancias específicas de cada una, es evidentemente necesario hace ya varias décadas.

Teniendo en cuenta lo anterior, surge el Centro de Estudios Urbano Regionales de la Universidad del Norte, URBANUM, cuyo objetivo es contribuir con el desarrollo sostenible de la Región Caribe del país, conformando una plataforma de conexión entre la experticia y capacidad académica e investigativa de la Universidad, con y hacia los actores de la vida local, regional, nacional e internacional, decisores e implicados con los asuntos urbanos y regionales.

URBANUM ha volcado su trabajo en torno a seis áreas estratégicas, las cuales han sido definidas como nucleares para la comprensión de las dinámicas urbanas en la Región Caribe. Las seis áreas son:

1. Planeación Urbano-Regional: desde esta área se estudiarán, analizarán, construirán y socializarán procesos, modelos, técnicas e instrumentos de planificación, con la intención de coadyuvar en la elevación de la calidad de vida los ciudadanos y las ciudades de la Región, a partir de intervenciones planificatorias de calidad.
2. Políticas Públicas y Cultura Urbana: desde esta área se atenderá la formulación de propuestas encaminadas a fortalecer el trabajo de las autoridades de las administraciones locales de la Región, con miras a impactar su desarrollo urbano, territorial y ambiental, fomentando la participación y generando ejercicios que eleven el nivel de corresponsabilidad y empoderamiento de los ciudadanos frente a los asuntos locales;
3. Urbanismo y Diseño Urbano: desde ésta área se desarrollarán propuestas que respondan en diseño, rigor y criterio a los lineamientos conceptuales del Centro, consolidando intervenciones de diseño urbano que logren constituirse en proyectos de impacto, generadores de cambio para las ciudades y el territorio del Caribe;
4. Economía Urbano-Regional: desde ésta área se analizará la realidad, los problemas, ejecutorias y, en general, el conocimiento de los sistemas económicos que se producen en los entornos urbanos y regionales del Caribe Colombiano y su relación con las demás dimensiones urbanas;
5. Tecnologías para el Desarrollo Urbano-Regional: desde ésta se desarrollarán, estudiarán, analizarán, propondrán y aplicarán desarrollos tecnológicos para la mejora de la calidad de vida de las ciudades y municipios de la Región Caribe;
6. Innovación en Técnicas y Metodologías Constructivas: desde ésta área se desarrollarán, estudiarán, analizarán, propondrán y ejecutarán metodologías y sistemas constructivos y de uso de materiales que respondan a las realidades sociales, económicas y ambientales de la Región Caribe.

URBANUM es un centro adscrito a la Rectoría de la Universidad del Norte, Barranquilla, Colombia, el cual está organizado en torno a un Comité Técnico-Directivo, encargado de fijar las directrices estratégicas y de tomar las principales decisiones relacionadas con su funcionamiento.

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