Lionel Messi (C) camina junto a miembros de su equipo en sesión de entrenamiento. Junio 17, 2015. AFP PHOTO / JUAN MABROMATA

La Argentina de Lionel Messi recuperó la confianza y el rumbo en la Copa América de Chile-2015 con un buen triunfo 1-0 ante el defensor del título, Uruguay, pero Gerardo Martino aún tiene trabajo por delante con un equipo que sufre mucho cuando lo atacan.

Un empate 2-2 con sabor a derrota ante Paraguay en el debut y una ajustada victoria contra los charrúas: el camino de la albiceleste en el certamen no es un lecho de rosas a pesar de que el pase a cuartos de final está casi asegurado. “No esperemos resultados abultados. El margen de un equipo con otro es muy chico y sacar diferencia no es fácil”, admitió el ‘Jefecito’ Javier Mascherano, para quien Argentina mejoró sin jugar un “partidazo”.

“Hemos dado un paso adelante. Hemos subido el tiempo en cuanto al volumen de juego. Si ganás de casualidad es una cosa y si lo hacés proponiendo es otra cosa”, dijo.

Después de probar ante los guaraníes con Ever Banega en el mediocampo, Martino volvió a lo seguro y decidió el ingreso de Lucas Biglia, subcampeón mundial en Brasil-2014 y rueda de auxilio de Mascherano en el centro del campo.

También regresó al once titular el experimentado defensor Pablo Zabaleta, y fue precisamente un centro suyo desde la derecha el que permitió a Sergio Agüero marcar el único gol del partido.

Defender sin vergüenza:

Ya lo había dicho el técnico uruguayo Óscar Tabárez, “defender no es mala palabra”, y en los últimos veinte minutos Argentina se metió atrás y aguantó el resultado sin ponerse colorado de vergüenza. “Defendimos el resultado como había que hacerlo”, dijo un realista Lionel Messi, que no cumplió una gran actuación.

Para el arquero Sergio Romero, que tuvo una atajada clave sobre el final, Argentina “no se desordenó nunca, ni con el 0-0 ni con el gol”, a diferencia de lo que le había sucedido contra los paraguayos. “Lo del otro día nos sirvió para mentalizarnos”, afirmó.

Si hubo orden y sacrificio, quedan por resolver los desacoples defensivos y la pérdida de control del juego ne la segunda mitad del complemente, ya que Uruguay dispuso de varias ocasiones de gol y pudo haber empatado.

“No pudimos sostener el ritmo en ninguno de los dos partidos, ante rivales de jerarquía debemos saber cerrar los partidos. Nos hace mucho daño no tener el control del partido, si bien no fue con la misma claridad del otro día, tuvimos dos o tres ocasiones que no definimos”, aseveró Martino.

Lucas Biglia matizó: “Sufrimos porque nos meten adentro con pelotas aéreas. Pero a nivel juego no sufrimos”, dijo el jugador de la Lazio de Italia, recuperado de una lesión en la rodilla que lo había tenido en duda para esta Copa América.

Argentina aspira a terminar primera en su Grupo B, en el que comparte el liderado con Paraguay con cuatro puntos. Los de Messi cierran la fase inicial el sábado ante Jamaica, que hasta ahora suma dos derrotas.

El gran objetivo de los de Martino es tomarse revancha de lo ocurrido en Brasil-2014 y poner fin a un sequía de 22 años sin títulos internacionales para la albiceleste. (AFP)