Por: Edith Gómez.

Actualmente, reciclar es un acto de amor y bastante importante para nuestro entorno, además de que nos ayuda a ahorrar dinero. Ello supone la reutilización de objetos de diferentes materiales, que en condiciones normales serían desechados. El reciclaje es un acto sustentable, el cual busca que el hombre aproveche los recursos que la naturaleza nos da, y que reduzca daños significativos al entorno en el que vivimos.

El reciclaje contribuye en la disminución de la continuación y en reciclar los objetos de manera continua en pro de la conservación ambiental. A pesar de ser un proceso positivo para el ambiente, se han venido difundiendo mitos a través de los medios de comunicación. Esto ha traído como consecuencia la poca participación de las comunidades.

Mitos sobre el reciclaje:

1. Los productos reciclados son de mala calidad: los productos fabricados con material reciclable son de buena calidad, de hecho pueden ser mejores que un producto hecho directamente con materia prima virgen. Existen materiales como el vidrio, el plástico y el metal que se pueden reciclar de manera indefinida sin perder la calidad.

Sin embargo, el papel tiene un número limitado para reutilizar ya que sus fibras se van debilitando. Muchos fabricantes de papel mezclan materia prima nueva con papel reutilizado para crear un producto de calidad.

2. Los envases de alimentos reciclados son perjudiciales para la salud: estos envases de alimentos reciclados son cada vez más comunes e igual de buenos que los que se fabrican a partir de materia prima virgen. Los envases no son sólo usados para crear más envases, sino que son usados también en la industria textil, en la industria automotriz y en la creación de muebles.

3. Se contamina más al transportar los materiales reciclables: los transportes que llevan estos materiales reciclables contaminan menos, en comparación con los transportes que llevan cualquier otro tipo de carga ¿por qué? Porque sólo se transportan cuando han llegado a un volumen determinado.

4. Reciclar es un negocio cualquiera: muchas personas piensan que el reciclaje es para lucrarse como el resto de los negocios. Sí, el reciclaje es una actividad industrial, pero que genera empleo, fomenta la innovación y ayuda al ambiente. Es la base fundamental de la economía circular, ya que los residuos se convierten en recursos y se protege el medio ambiente.

La industria del reciclaje evita que se exploten los recursos naturales con el fin de extraer materia prima, al mismo tiempo que se ahorra agua y energía.

5. No sirve separar los desechos si todo se mezcla en el mismo camión: esto no es cierto. Aunque se use el mismo camión para recoger los desechos, jamás se mezclan, ya que cuentan con un sistema bicompartimentado en su interior. Se usa un solo camión con el fin de optimizar el servicio y limitar la contaminación por parte del transporte.

6. Nadie va a salvar al mundo por reciclar: no hay nada más valioso que poner nuestro granito de arena por más pequeño que parezca. Poco a poco se pueden lograr cambios importantes en el mundo. En el 2014, en España, se recicló el 72 % de los envases domésticos gracias a la colaboración de distintas comunidades, ahora imagina lo que lograríamos si el resto de los países hiciera lo mismo.

7. Reciclar deja sin trabajo a la gente de las plantas: todo lo contrario. De hecho genera 10 veces más empleos que una fábrica de productos hechos de materia prima virgen. Como ejemplo de ellos tenemos a Ecoembes, una organización española que se dedica al reciclaje y al ecodiseño de envases, la cual ha generado más de 42.600 empleos.

Después de desmentir los mitos más comunes del reciclaje, esperamos que comiences a colaborar en la bonita tarea de salvar al planeta a través de la reutilización de los desechos. Si eres una persona creativa con las manos, puedes diseñar tus propios productos con material reciclable. Y, ¿por qué no surgir con un negocio fácil y rentable? No solo se trata de separar los desechos en contenedores, sino de crear también.

Todos ganamos con el reciclaje. Es hora de poner manos a la obra y darle el respeto y el amor que se merece nuestro planeta, después de todo es el hogar donde vivimos.