La economía colaborativa

Por: Francisco Manrique.  

No es posible solucionar problemas exponenciales con soluciones lineales”. Banny Banerjee Stanford Chan


En mi Post anterior, me referí al surgimiento de “la nueva economía“. En este Post voy a profundizar en una de sus manifestaciones más interesantes: la economía compartida o “sharing economy”. Este concepto está  teniendo un profundo impacto en muchos sectores a partir del uso del internet, y de las nuevas tecnologías desarrolladas,  que permiten el análisis masivo de los datos con el uso de la Inteligencia Artificial.

Para este artículo me he basado en la lectura de varios documentos, en especial de dos libros: The Exponential Organizations y Peer Inc. Para mí son lectura obligada para entender los inmensos cambios que hoy estamos presenciando en el mundo de los nuevos negocios.

La tecnología asociada al Internet, y el desarrollo impresionante de las comunicaciones, han facilitado el surgimiento de la economía compartida. El internet está cambiando muchos paradigmas, al facilitar la colaboración entre empresas e individuos. Cada uno de ellos tienen su fortaleza,  que cuando se unen, están dando origen a la nueva economía compartida de colaboración.

Como lo menciona Robinson Chase, autora de Peers Inc, y fundadora de Zipcar, la fortaleza de las empresas, los gobiernos y las instituciones, es que les permite aplicar recursos significativos, talento y dinero para simplificar problemas complejos, aplicando las economías de escala, garantizando la aplicación de estándares para lograr consistencia.

Las fortalezas de los individuos y las pequeñas empresas, reside en la posibilidad de operar localmente a escalas pequeñas, apoyándose en redes de pares, ofreciendo a la medida y de manera especializada, productos y servicios únicos a sus clientes.

La unión de las fortalezas de estos dos actores permite aprovechar los excedentes de capacidad, lo que tiene mucha lógica económica. El concepto de unirlos, permite encontrar la abundancia donde antes había escasez apalancada en la capacidad, que tienen los jugadores pequeños, de experimentar, adaptar, y evolucionar. Cuando se hace bien, se generan cambios a una velocidad, escala, y calidad impresionantes. Esta es la transición de la industrialización capitalista a la economía colaborativa.

En razón de lo anterior, la siguiente es la premisa fundamental de la nueva economía compartida propuesta por Chase: en un mundo de escasez, es posible unir a muchas personas diversas, con la capacidad de las organizaciones, para crear abundancia. De esta manera, se re escriben la reglas de creación de valor al conectar las mentes y los activos de mucha gente. En esta nueva economía se busca reducir a cero los costos marginales de cualquier transacción.

Cuando hay exceso de capacidad, y se usa la tecnología, es posible experimentar a costos más bajos porque se utiliza un activo que ya existe y fue probablemente pagado, minimizando la necesidad de capital. En esas condiciones se justifica el desarrollo de plataformas para organizar, simplificar y estandarizar su utilización. El objetivo es volver lo costoso y complejo, algo sin costo y muy sencillo de utilizar

Hay ejemplos muy interesantes de la aplicación de estos conceptos. Zipcar es una compañía que puso patas arriba las creencias fundamentales de la industria del automóvil cuando Chase – su fundadora- propuso: la gente prefiere compartir un carro y usarlo cuando lo necesita, en lugar de comprar un activo que permanece muchas horas sin utilización. En el proceso de implementar esta idea pionera, en un nuevo modelo de negocio, se logró reducir el costo de la transacción de alquilar un carro de US$10 a cero.

El concepto de compartir – sharing economy- está embebido en la idea de cómo tener acceso a la capacidad ociosa de muchos activos. En el caso de un auto, Zipcar lo adquiere y permite su utilización en menos de 15 seg, y en tramos de 30 min o más, de manera que el usuario solo paga por lo que consume y lo hace muy fácil de utilizar. La empresa le facilita acceder al vehículo, al estacionar su inventario en muchos sitios. Con un App y un código, el usuario abre el carro y se lo lleva sin la intervención de un empleado

Partieron de dos premisas fundamentales:

  • Los clientes pueden ser colaboradores, y es posible confiar en ellos para que recojan un carro y lo devuelvan sin tener supervisión. Aquí vemos el papel que juega la confianza en esta nueva economía.
  • La tecnología posibilita tener un control efectivo para que la premisa anterior fuera válida..

Zipcar planteó un modelo de negocio que generaba una propuesta de valor innovadora al usuario potencial: en lugar de adquirir un activo para utilizarlo muy poco, es preferible compartirlo con otros, facilitando el acceso al vehículo cuando le sea necesario, en tramos muy cortos de tiempo, a un costo muy razonable, y sin tener que hacer la inversión..

De acuerdo a un artículo reciente de McKinsey, las tendencias descritas de la economía compartida y los autos autónomos, van a producir una verdadera revolución en la industria automotriz. Esto explica porque Zipcar, fue adquirida por Avis, y porque GM acaba de pagar US$500 millones por Lyft , el competidor más cercano de Zipcar

La semana pasada, Toyota le dio luz verde al desarrollo de su versión de vehículos sin conductor, a pesar del escepticismo inicial que había mantenido su presidente. El Gobierno de Obama acaba de anunciar  una inversión de US$4.000 millones para acelerar el proceso de vehículos autónomos. Google fue la pionera en el tema. En los últimos dos años ha tenido vehículos de prueba con más de dos millones de km sin casi ningún accidente.

El modelo de Zipcar, así como la aparición de autos sin conductor, tienen el mérito de reducir el número de vehículos en las vías, disminuyendo los accidentes y la polución, aumentando el tiempo de utilización del activo. Los cálculos de reducción son impactantes: de 400 carros que son necesarios para mover 1000 personas, se puede bajar a solo 30 vehículos. Hoy más de 1 millón de personas utilizan 15.000 vehículos de Zipcar.

Airbnb es otro ejemplo donde la gente comparte su casa o su apartamento. En la actualidad,  tiene la oferta más grande de camas en el mundo: 1.3 millones. En sólo cuatro años, esta ecompañía logró tener más habitaciones que los grupos hoteleros Intercontinental y Hilton, que hoy cuentan con más de 600,000 habitaciones cada uno. Al primero le tomó más de 60 años llegar a esa cifra, al segundo casi 100 años.

En este caso, el modelo de negocio es distinto al de Zipcar. La empresa agrega en su plataforma, la oferta de casas y apartamentos pertenecientes a cientos de miles de propietarios individuales cuando no los están utilizando, o cuando tienen habitaciones disponibles. De esta forma, Airbnb genera valor al agregar y organizar una oferta de manera confiable y conocistente.

Este nuevo modelo de negocio, ha permitido abrir una oferta de capacidad que antes no estaba disponible, a pesar de que los espacios ofrecidos estaban ya construidos y en posición de sus dueños. Para muchísima gente,  Airbnb hizo muy sencilla y atractiva la posibilidad de volverse micro empresarios hoteleros. Al agregar y organizar esta oferta inmensa, también le generó gran valor y utilidad a los potenciales clientes. Además, todo esto se ha logrado a escala mundial.

Lo que es muy interesante de estos ejemplos, es que sus modelos de negocio permiten el uso de la capacidad sobrante: autos, habitaciones, salud, etc., de una manera sencilla y a bajo costo. Un ejemplo del uso recreacional de la capacidad sobrante, es el caso de las ciclo vías de los domingos en Bogotá, cuando están menos utilizadas.

¿Y cómo juega la tecnología en toda esta historia de la nueva economía? A partir del desarrollo de programas de software sofisticados, se construyen las plataforma que permiten conectar, organizar, agregar, y empoderar a los miembros de una comunidad. Esto facilita la cocreación, la innovación, y el uso de la capacidad sobrante, reduciendo el costo y el esfuerzo, pero también bajando significativamente las barreras de entrada.

Ahora bien, el desarrollar una buena plataforma, que permita la escalabilidad exponencial, necesita de inversiones importantes en código. También, requiere cada vez más, del uso sofisticado de la análitica para el manejo e interpretación de grandes bases de datos -( BIG DATA)- con el uso creciente de  algoritmos complejos y de la Inteligencia Artificial ( IA).

El caso de Duolingo es muy interesante. Esto es una plataforma que le permite al estudiante aprender gratis otro idioma en muy pocas horas. La empresa utiliza información de miles de estudiantes para analizarla y descubrir las mejores prácticas que aceleren el aprendizaje del estudiante. El sistema sofisticado que utiliza, le sigue la pista en tiempo real, a los errores cometidos por el usuario, para aprender de los patrones de comportamiento registrados. Igualmente es capaz de responder al progreso que muestra el usuario para ofrecerle lecciones hechas a la medida que le permitan desafiarlo de forma personalizada.

Pero lo más interesante es el costo marginal que tiene la adición de un usuario, una vez que la plataforma entra en operación. Todo lo anterior se traduce en la capacidad de  escalar muy rápidamente este tipo de empresas. Este factor es tremendamente bien valorado por los inversionistas que están dispuestos a pagar una fortuna. El ejemplo de Uber es impresionante con una valoración  de US$60 billones de dólares.

Pero también, las plataformas descritas tienen beneficios para los usuarios. En estos espacios se pueden conectar con una gran diversidad de individuos apasionados y talentosos,  con intereses similares y con perspectivas diferentes, con el ingenio para producir soluciones innovadoras.

Las plataformas permiten formar comunidades de colaboración donde la meritocracia es fundamental para conectarse cuando se aporta tiempo, ideas y ceatividad. La posibilidad de recibir buenos o malos comentarios, es la manera en que se construye o destruye el buen nombre de un participante, y su acceso a las redes activas de conocimiento. Quien juega bajo las reglas de juego de la comunidad, tiene ayuda diversa que le economiza mucho tiempo y esfuerzo, lo que le permite  aprender más rápidamente de sus errores .

En esta economía colaborativa “on line “, lo que se valora es la capacidad de hacer las cosas bien. La reputación de la persona es más importante que su lugar de origen, raza, religión, etc. Como un excelente ejemplo, Trip Adviser donde se puede buscar información para viajar, lo más consultado son los comentarios de la gente. Por esta razón, se usan estas plataformas porque se la gran inversión hecha, y porque el usuario tienen acceso organizado de la oferta y la demanda. Además, confían en los protocolos de comportamiento exigidos que les da transparencia y credibilidad. Son espacios donde si opera la sanción social.

Para dar una escala del potencial de estos nuevos modelos de negocio, compañías como eLance-oDesk y Freelancers Union, tienen 2 millones de empresas buscando servicios y a 8 millones de personas de 180 países ofreciendo trabajos varios. Esto les permite ofrecer servicios y productos con costos muy bajos, a la medida y de forma especializada. La gente califica al proveedor y al usuario de manera inmediata.

El común denominador de los ejemplos citados, es que estas plataformas tecnológicas permiten el crecimiento exponencial de los emprendedores y sus empresas.  WharsApp es el caso de una empresa, que después de cuatro años de haber sido lanzada como producto, cuenta con 450 millones de usuarios, y 1 millón de personas se les unen a la plataforma cada día. En ese periodo, se transmiten 19 billones de mensajes, cantidad que supera los que se transmiten por los medios tradicionales.

Como se puede observar de lo descrito en este blog y en el anterior -(leerlo si no lo ha echo)- es una revolución en marcha, donde la velocidad con la que ocurren las cosas, impide mantener fácilmente el ritmo del cambio. Y se necesita gente preparada, con una vision diferente para jugar este juego de manera exitosa.

Sé que la inversión en Colombia en las vías de cuarta generación, con versiones de más de US 30.000 millones, es fundamental para desatracar la infraestructura física del país. Pero mientras esto sucede, ¿cuando vamos a hacer un esfuerzo similar en su infraestructura mental dados los cambios descritos.?  Cuando nos despertemos a esta realidad, ya va a ser muy tarde, y lamentablemente no hemos entendido el verdadero sentido de urgencia que nos están generando estas realidades. (Ver discurso de Obama la semana pasada ante el Congreso).

Y para quienes todavía curiosidad de explorar estos cambios, los invito a ver en TED “Ole Scheeren : “Why great architecture should tell a story” . Es el mundo de las narrativas, la  Innovacion, y los conceptos de la colaboración llevados a los espacios físicos. Espectacular !!!


 

Debes loguearte para poder agregar comentarios ingresa ahora